Roberto Alifano , poeta y viajero infatigable , no solo oficia el misterio de las palabras , los lugares remotos y las amistades entrañables , práctica también otro arte no menos arduo ni grato : la pintura.
El poeta cree en las palabras, las codicia y las ama, siente pudor al pronunciarlas; es en el ámbito de las palabras donde triste o dichosa juega su vida. Ellas definen su temperamento. Roberto ha cortejado a las palabras y estas le han retribuido con un cálido sentir de la amistad y del arte.
De modo semejante, nuestro pintor ha establecido con el lenguaje de las formas y colores una fiel y pausada relación. Durante largos años, acompañados por la amistad de artistas de la talla de Soldi, Cogorno, Páez y Alonso, su pincel permaneció activo pero casi oculto. Hoy confiesa su silencioso amor.
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